Jaleo

Tapas Bar Jaleo

Jaleo Bar de tapas

No hay nada más rico que la combinación de tintos de verano con patatas bravas, por lo menos para mí es perfecto para empezar la tarde.

Y después Jaleo te recibe con unas aceitunas de cortesía, tienen aceite de oliva y especias, deliciosas. Desde ahí sabrás que aunque el lugar no es barato vale la pena cada peso.

Jaleo es un lugar español, con ubicación perfecta, aunque es un poco muy reducido el espacio en el que está. Apenas caben dos mesas a lo ancho, es un chorizo de local, pero vale la pena, es muy rico.

Con una vista muy agradable, con ventanas grande en la parte de arriba podemos ver el Parque Lincoln. En un ambiente informal, pequeño, tiene terraza como todos los restaurantes de Emilio Castellar.

Si eres fan de las entradas, de los montaditos este lugar podrá convertirse en uno de tus favoritos, recomiendo empezar con una tavla de quesos o una de jamones ibéricos. Encuentras montaditos desde jamón serrano, salmón o foie gras con cebolla caramelizada. Puedo recomendarte los choricitos y te llevan un pan que no se si lo hacen ahí pero parece, fresco y suave.

Tienen una pizarra alterna en donde ofrecen tapas alternas del día por si te sientes aventurero ese día, hay bocatas y ensaladas.

El postre tampoco te lo puedes perder, hay un panque de almendras que en lo personal no pensé que fuera tan bueno, pero una vez que lo probé el panqué de almendras que Jaleo me ofrecía se derretía en tu boca… exquisito!

Interior Jaleo, pequeño pero acogedor

Y como ya se dieron cuenta que me gusta mucho Polanquito que mejor que terminar la velada con una caminata por el Parque Lincoln, con los edificios antiguos que lo rodean, la gente que sale con sus perros y el clima delicioso que tiene la ciudad.

Si al dìa siguiente necesitas una ayuda para la cruda te recomendamos ir a Chilakillers.